Días densos, sobrecargados en un Brasil a la deriva. Días de reforma laboral y de las pensiones, ambas retrógradas, que se suman al Lava Jato, que involucra a los líderes del gobierno y de la oposición, a cinco ministros, a diez gobernadores, a los presidentes del Senado y Diputados y a una porción aún no establecida de representantes electos.