“PT quiere deshacerse de Dilma”

 

Al entrar a la simpática casa del abogado Carlos Franklin Paixão de Araújo a orillas del río Guaíba, le cuento que, la primera vez que estuve en Porto Alegre, en 1988, él era candidato a intendente por el Partido Democrático Laborista (PDT, por sus siglas en portugués). 

Y que, por alguno de los misterios de la memoria, nunca olvidé el jingle de su campaña, y lo canto: “Carlos Araújo é pra valer/Araújo e Carrion é o PDT/Carlos Araújo vem na frente/Depois é o Brizola presidente”.

Él ríe plácidamente y recuerda que la musiquita era realmente pegadiza y que hasta hoy, casi 30 años después, mucha gente como yo la sabe de memoria.

Carlos Araújo perdió esa elección ante Olívio Dutra, y el gaúcho Leonel Brizola nunca llegó a ser presidente. Quien sí llegó al poder fue la ex esposa de Carlos, Dilma Vana Rousseff.

El abogado y la presidenta electa de Brasil militaron juntos en la resistencia a la dictadura, fueron pareja durante 25 años y de la relación nació la única hija de Dilma, Paula. Aun separados, Dilma y Carlos siguen siendo buenos amigos, y el ex marido ha sido, a lo largo de los años, uno de los principales confidentes de la presidenta.

El jueves 25 de agosto, Carlos Araújo dialogó con el blog Socialista Morena sobre el golpe que arrancó a Dilma del gobierno, y dijo que, como su ex esposa, está enfrentándolo con una suerte de “indignación serena” pero sin ilusiones.

Carlos cree que las élites están “pegándose un tiro en el pie” y se arrepentirán de haber destituido a Dilma.

También formula duras críticas al PT por haber abandonado a la presidenta. “El PT nunca soportó a Dilma. Quiere deshacerse de ella para atribuirle todos los problemas que enfrenta”.

-Durante muchos años Dilma fue “la esposa de Carlos” y hoy tú te has convertido en “el ex marido de Dilma”. ¿Cómo vives este cambio de roles?
-No le doy importancia a eso. En primer lugar, estoy muy orgulloso de que Dilma haya tenido todo este ascenso político, muy justo, por cierto. Me llena de orgullo, no me afecta en absoluto, sino todo lo contrario, me conmueve. Eso es algo normal en la vida, sinceramente no le veo nada de excepcional al cambio de roles. Siempre hemos sido compañeros, y lo somos hasta hoy.

Somos muy compañeros. Dilma en los últimos tiempos viene todos los fines de semana a casa, almuerza los sábados y domingos, se lleva muy bien con mi esposa. Somos compañeros y los compañeros están para eso, para ayudarse mutuamente en todas las circunstancias.

-¿Cómo estás viviendo este momento? ¿Cuál es la principal sensación que tienes hoy?
-La principal sensación es de indignación por este crimen que están cometiendo contra Dilma, es algo absurdo. Justo Dilma, contra quien no han logrado probar nada, es juzgada por un bando de ladrones y estafadores sin escrúpulos. Esta es la inversión de los factores, algo increíble.

El New York Times publicó un largo artículo que decía precisamente eso, es inconcebible.

Al menos dos cosas permanecerán: que Dilma fue el único presidente que permitió investigar todo, no protegió a nadie, y nunca obstaculizó investigaciones, algo que nunca antes había sucedido.

Y la segunda es que siempre mantuvo esta postura de dignidad, siempre correcta. Están inventando formalismos con tal de justificar lo injustificable. Me siento indignado, pero a la vez tranquilo, porque sabemos que esto forma parte del proceso. Y la indignación viene bien para renovar nuestras energías.

 

-El poder económico se volvió contra Dilma, ¿verdad?
-En parte sí. José Luiz Trabuco, de Bradesco, y la gente de Itaú la apoyaron, incluso en medio de la crisis. Quien se volvió contra ella, y esto es un problema que Brasil tiene que examinar, fue la Federación de Industrias del Estado de São Paulo (Fiesp). Fue la Fiesp la que comandó todo. Esta federación ha sido un bastión reaccionario desde 1932. Por ella pasan las cosas más reaccionarias y también las más indignas.

La Fiesp fue uno de los principales financiadores del DOI-Codi, el aparato represor de la dictadura, como ha sido demostrado. Y continúa en esa línea. ¿Y qué es la Fiesp? Un antro de corruptos. Hace poco se reveló que uno de sus directores debe hace 30 años, 6.000 millones de reales al gobierno federal y no piensa pagar.

-En 1989, la Fiesp también jugó un papel importante en la derrota de Lula da Silva...
-Sí, afirmaban que mil empresarios dejarían Brasil si Lula ganaba.

Una gran parte de la burguesía nacional se arrepentirá de lo que hizo. Si llevan adelante el ajuste que quieren hacer -creo que no lo van a lograr-, todo este tema de la reforma laboral, la contracción de los salarios, se va a demostrar que la burguesía se pegó un tiro en el pie.

Se reducirá el mercado interno increíblemente y sin él nuestras élites no tienen cómo prosperar porque en realidad la base está en la economía nacional.

Actualmente ya no existe aquel capitalismo concebido por Getulio Vargas, basado en el aspecto social y que fue apoyado en su momento por grandes empresarios como Ermírio de Moraes, Matarazzo y grandes banqueros también, que tenían una visión más autónoma de desarrollo.

Actualmente los empresarios andan por ahí, para lo que venga, quieren hacer dinero, no importa dónde, si aquí o en las Islas Caimán. Las élites pueden tener la ilusión de que les es favorable, pero es un plan que está construido y dirigido por los grandes conglomerados internacionales.

-Es para quienes especulan en la bolsa.
-Exactamente, para el capital especulativo. Aquel que produce va a pasar zozobras. Así que insisto en que se están pegando un tiro en el pie, pero existe un componente ideológico en la Fiesp que lo explica todo, no es un componente económico.

Se trata del componente antipueblo, que no quiere poner en riesgo ningún privilegio. Observen nomás lo que están haciendo: terminar con el Mercosur, una vergüenza, un proyecto clave para nosotros que representa nuestra autonomía internacional.

No pongo en duda que dejen también el grupo Brics. Se evidencia una entrega casi absoluta al capital internacional. José Serra, canciller de Temer, es eso, un entreguista.

Pero el principal factor de complicación es que habrá elecciones en dos años.

Todos sabemos que Aécio Neves será candidato, porque domina la estructura del PSDB; Alckmin, por su parte, deja el PSDB y competirá por el PSB; y Serra está negociando con el PMDB para ser su candidato, por eso lo pusieron donde está, para que tenga una vidriera donde mostrarse.

-Serra puede postularse como el vicepresidente de Temer, ¿verdad?
-Sí, es una posibilidad. Pero es muy difícil que realicen alianzas, casi imposible diría. Hay demasiado odio entre ellos, sobre todo entre Aecio y Alckmin que en las recientes elecciones para la alcaldía de São Paulo se hicieron y dijeron de todo.

Este problema estará presente en todos los actos dentro de dos años. Y está Lula, que si lo dejan solo puede ganar la elección, aun con toda la carga negativa que tiene el PT.

-¿Crees que Lula será candidato o apoyará a Ciro Gomes?
-Estoy seguro de que Lula se postulará si lo dejan. Si no, apoyará a Ciro. Pero Lula ha dicho que quiere ser candidato.

-¿El PT está ofreciendo el debido respaldo a Dilma?
-No. El PT está tratando de escapar de su responsabilidad, es una vergüenza. Todo lo que sucedió dentro del partido habría pasado porque Dilma actuó mal, cuando en verdad es al revés: el PT está mal por los actos que cometió, porque no castigó a nadie, no tomó medidas en relación a los bandidos que tenía dentro del partido, en la propia dirección. 

Tendrá que hacer un mea culpa y llevarlo hasta las últimas consecuencias, explicar a la sociedad, porque le debe explicaciones a la sociedad. Desde que comenzó este rollo trataron muy mal a Dilma, siempre la han tratado mal.

-Creo que se remonta a un tiempo atrás, el PT no quería que ella fuera candidata, ¿no es así?
-No, aunque no tenía ningún candidato, ellos no querían a Dilma. El único candidato que tenían, que era Tarso Genro, tampoco lo querían. 

Y en la reelección no la querían en absoluto, pero no podían oponerse porque Dilma tenía muy altos índices de apoyo. Hasta ahora el PT maneja muy mal los desacuerdos con Dilma. Es natural que haya diferencias entre el gobierno y el partido, pero hay que saber cómo tratar el tema.

-¿Dilma está muy sola en este momento?
-Muy sola, muy abandonada. Tiene media docena de personas ahí que la apuntalan y respaldan pero el PT no hace nada para apoyarla. Tiene sí el apoyo de Lula, pero no del resto. 

¿Cómo el PT puede ser respetado por la sociedad? Simplemente no puede

-Tuvieron todo para hacer la reforma política cuando Lula estuvo en el poder pero terminaron actuando igual que los demás partidos.
-Pudieron haber profundizado en eso, aprovechado el envión, haber convocado al pueblo a las calles para llevar a cabo un verdadero cambio.

Un partido de izquierda que asuma el gobierno, debe desde el principio apoyarse en el pueblo y esa es la gran lección que deja esto: convocar al pueblo porque lo que estamos viviendo es una nueva modalidad de golpe, el golpe parlamentario.

Getúlio hacía esto: cuando las cosas se ponían feas, realizaba un enorme meeting en la cancha del Vasco da Gama, para dar explicaciones a la población.

Cualquier partido de izquierda que asuma un gobierno en cualquier parte del mundo tiene que hacer eso, de lo contrario está condenado a ser derrocado.

Hay que entender que ningún partido de izquierda gobierna sin la gente en la calle, sin el respaldo de la gente, sin que el pueblo entienda lo que está sucediendo.

Lo que vemos en Brasil es un ejemplo más de la crisis del capitalismo.
El capitalismo de hoy es muy diferente del de hace 50 años. Toda sociedad, cuando comienza a llegar a su ocaso, pierde en primer lugar los valores éticos.

No estoy diciendo que el capitalismo desaparecerá en 100, 500 años. Digo que se dirige hacia el ocaso. ¿Cuáles son los síntomas de esto?

Obama ha dicho que no va a fabricar nada más porque el gobierno no tiene dinero, que si el capital privado quiere que lo haga.

El interés de Estados Unidos reside en el consumo, pero ha dejado de contar con una industria pujante y tampoco puede manejar bien determinadas situaciones.

No saben cómo tratar con China, intentaron hacer un acuerdo Pacífico- Pacífico para tratar de bloquear a China, cuando le deben 13 billones de dólares...

-¿Y el papel de los medios en todo esto? Ellos también fueron un gran enemigo de Dilma.
-Es cierto, son los mismos medios desde 1930, no han cambiado. Masacraron a Getúlio también. 

Pero observa lo siguiente: los medios de comunicación están, tienen todo este poder, pero no puedo asignarle  mucho valor a eso. La derecha los controlaba y perdió cuatro elecciones. 

Cuando las corrientes son bien conducidas los superan. 

-El pueblo es más importante.
-Sí.

-Sin embargo, se las arreglaron para poner en cabeza de la gente que Dilma robó sin que eso sea verdad...
- Dentro de poco se va a aclarar. Hay que tener claro que son sus medios de comunicación. Nosotros nunca lo logramos, fue un error muy grande de Lula, estar en contra de tener medios de comunicación propios, del Estado.

-¿Dilma regresará al PDT?
-Creo que se queda en el PT, a pesar de lo bastardeada que fue. Se trata apenas de una corazonada, nunca hablamos del tema. Por Lula se queda, pues se siente muy agradecida.

-¿Pero Lula quería la candidatura de Dilma para la reelección o quería candidatearse él?
-El 31 de diciembre de 2010 estábamos en la Granja do Torto con Lula y su esposa Marisa y surgió el tema de la reelección de Dilma Lula dijo: “si ella está bien conceptuada, no tengo duda alguna de que debe ser candidata”. Eso siempre lo respetó.

-Era el PT el que no quería.
-De cierto modo, el PT nunca soportó a Dilma, por eso de que “ella no es de nuestra base”. Después usaron el argumento de que en el gobierno ella no valorizaba al partido.

El PT es muy prejuicioso con todo aquel que no esté de acuerdo con ciertas prácticas y pensamientos.

Dilma siempre tuvo un pensamiento independiente, siempre rompió con la estructura y no pertenecía a ningún grupo. Tenía el poder de elegir a su equipo y lo eligió. Así que, como el PT la criticaba, se sintió autorizada para gobernar a su manera.

-Dices que el PT es prejuicioso, pero ¿y los prejuicios de la elite hacia el PT?
-Es cierto, pero el PT lo agravó con su comportamiento. Los gobiernos de Lula y Dilma beneficiaron en gran medida a las elites y por el otro, a los desposeídos. Era casi un campesinado lo que había antes de que el PT llegara al poder en Brasil.

Y quien se sintió perjudicada fue la clase media, especialmente la clase media alta. Se debió atender más a esa clase media.

-Y los errores de Dilma, ¿cuáles fueron?
-Dilma cometió errores al final del primer gobierno y al principio del segundo. La exoneración de la nómina de la previsión social, por ejemplo, en un intento de conseguir más dinero para inversión, cuando no pasa por ahí la cosa. La forma en que lo hizo no fue acertada, nos damos cuenta ahora.

-¿Le has dicho eso a ella? Una de las críticas que siempre se le hizo fue que no aceptaba consejos de nadie.
-Soy amigo, confidente, pero no soy su consejero ni nada. Y aceptar asesoramiento del equipo que tenía a su alrededor podría no ser muy conveniente...

-Elegir a Joaquim Levy para Hacienda ¿no fue un error?
-Levy fue un intento equivocado de superar la crisis lo más rápidamente posible. Lo que debió haber hecho Dilma fue dirigirse al pueblo, pedir la ayuda de la gente para modificar algunas cosas. Levy fue un intento ilusorio.

-¿Qué nos espera de aquí en adelante?
-Mucha lucha si queremos cambiar algo. Tenemos un gran líder que es Lula y las cartas se deben jugar con él. Este asunto de partido ideológico nunca existió.

Lo que existió fueron líderes. Churchill, De Gaulle, Lenin, fueron los portavoces de la ideología. También tenemos que capacitar a nuevos cuadros para que el líder tenga un grupo a su alrededor para ayudarle a pensar.

-¿La izquierda en América Latina no existe más, como afirma la derecha?
-No creo, la izquierda es muy fuerte en América Latina. La derecha quisiera eso, pero no va a suceder. Bernie Sanders, en Estados Unidos, es una prueba de ello, él formará un partido de izquierda allá.

É típico das fases de crise do capitalismo que a direita apresente propostas de cunha popular, mas esse espaço é limitado, embora significativo. Onde a direita tem uma história de fato é na Áustria.

-Si Dilma pasara a la historia como una persona que fue injuriada, ¿cómo quedará Temer?
-Como un golpista traidor, y será execrado. Temer es el Joaquim Silvério dos Reis** de la era moderna.