08
Agosto
2016
Otro trabajador rural asesinado
De nunca acabar
Barak Fernandes - Contag
Fotomontaje: Contag
Otro padre de familia, otro trabajador rural, acaba de morir en el campo brasileño asesinado por esbirros al servicio de los latifundistas.
Se trata de Ronair José de Lima, presidente de la Asociación Terra Nossa, baleado en una emboscada en el Complejo Divino Pai Eterno, en el municipio de São Félix do Xingu, estado de Pará.
El mismo estado de Pará de la masacre de Eldorado dos Carajás, el mismo Pará que encabeza desde hace años la lista de los estados brasileños con mayores índices de violencia en el campo.
Según relataron testigos del crimen, en la mañana del jueves 4, Ronair recibió varios disparos de arma de fuego a la altura del tórax. A pesar de haber sido asistido por sus compañeros del campamento, falleció en el lugar.
Ronair era constantemente amenazado por parte de los terratenientes que afirman ser los propietarios del Complejo Divino Pai Eterno.
La amenaza más reciente databa del 22 de julio pasado.
Ese día, a las 7.30 de la mañana, al salir de su casa en motocicleta en compañía de su hijo, fue abordado por una camioneta blanca Toyota Hillux. A bordo iban un grileiro* que reclama las tierras del Complejo y que cuenta con antecedentes penales por dos crímenes, su hermano y una tercera persona armada con una pistola calibre 38.
En los últimos diez años otros cinco trabajadores fueron asesinados en el Complejo Divino Pai Eterno.
¿Hasta cuándo y cuántos trabajadores y trabajadoras rurales deberán morir para que los organismos responsables tomen las medidas correspondientes?
El mismo estado de Pará de la masacre de Eldorado dos Carajás, el mismo Pará que encabeza desde hace años la lista de los estados brasileños con mayores índices de violencia en el campo.
Según relataron testigos del crimen, en la mañana del jueves 4, Ronair recibió varios disparos de arma de fuego a la altura del tórax. A pesar de haber sido asistido por sus compañeros del campamento, falleció en el lugar.
Ronair era constantemente amenazado por parte de los terratenientes que afirman ser los propietarios del Complejo Divino Pai Eterno.
La amenaza más reciente databa del 22 de julio pasado.
Ese día, a las 7.30 de la mañana, al salir de su casa en motocicleta en compañía de su hijo, fue abordado por una camioneta blanca Toyota Hillux. A bordo iban un grileiro* que reclama las tierras del Complejo y que cuenta con antecedentes penales por dos crímenes, su hermano y una tercera persona armada con una pistola calibre 38.
En los últimos diez años otros cinco trabajadores fueron asesinados en el Complejo Divino Pai Eterno.
¿Hasta cuándo y cuántos trabajadores y trabajadoras rurales deberán morir para que los organismos responsables tomen las medidas correspondientes?
*Grileiro: Ladrón de tierras, especulador.