21
Marzo
2017
Con Juan Martini
“La industria nacional está siendo masacrada”
En Buenos Aires, Gerardo Iglesias
Juan Martini
El 7 de marzo, la Confederación General de Trabajadores (CGT) convocó a una movilización contra las medidas económicas del gobierno de Mauricio Macri. La Rel dialogó con Juan Martini, secretario general de la Federación Argentina de Trabajadores Tabacaleros, acerca de la situación global en Argentina y en la industria del cigarrillo en particular.
-¿Cómo evalúas la movilización del pasado 7 de marzo?
-Hacía mucho tiempo que no veía una movilización con la convocatoria que tuvo esta y responde a que hay un gran descontento entre los trabajadores.
Ha habido muchos despidos, gente que no consigue trabajo y los empleos existentes son cada vez más precarios. El incremento de la inflación desvaloriza a los salarios y la gente no puede más.
-El descontento es generalizado.
-Sin dudas, porque apenas terminas de negociar un incremento salarial, por ejemplo del 18 por ciento, y al poco tiempo ya te lo comió la inflación.
Es insostenible seguir así y por lo que se pudo ver en esta movilización esto no termina bien.
-Hace unos años, en una entrevista en que le preguntaron su opinión sobre una manifestación popular contra el gobierno de Cristina Kirchner, el actual presidente Mauricio Macri decía que las autoridades iban a tener que poner atención a las manifestaciones porque era un síntoma de gran disconformidad. ¿Estará preocupado hoy el presidente?
-Creo que sí. Esto sin dudas es una advertencia del pueblo, que ya está cansado de tanto manoseo.
Si no cambia de rumbo y busca una forma de consensuar para buscar una salida a la actual situación, a Macri se le va a poner cada vez más difícil.
Hablamos de una crisis económica que no afecta sólo a los trabajadores y trabajadoras sino que está destruyendo a la pequeña industria y a los pequeños comerciantes.
Todos los días está cerrando un comercio y esto es grave y preocupante. La movilización del 7 de marzo responde al hartazgo de la gente, que pide un cambio ya.
Si el gobierno insiste en su política cerrada de aumentar las importaciones de productos industrializados y la industria local se viene en picada, no hay forma de sostener este modelo por mucho tiempo más.
-Hacía mucho tiempo que no veía una movilización con la convocatoria que tuvo esta y responde a que hay un gran descontento entre los trabajadores.
Ha habido muchos despidos, gente que no consigue trabajo y los empleos existentes son cada vez más precarios. El incremento de la inflación desvaloriza a los salarios y la gente no puede más.
-El descontento es generalizado.
-Sin dudas, porque apenas terminas de negociar un incremento salarial, por ejemplo del 18 por ciento, y al poco tiempo ya te lo comió la inflación.
Es insostenible seguir así y por lo que se pudo ver en esta movilización esto no termina bien.
-Hace unos años, en una entrevista en que le preguntaron su opinión sobre una manifestación popular contra el gobierno de Cristina Kirchner, el actual presidente Mauricio Macri decía que las autoridades iban a tener que poner atención a las manifestaciones porque era un síntoma de gran disconformidad. ¿Estará preocupado hoy el presidente?
-Creo que sí. Esto sin dudas es una advertencia del pueblo, que ya está cansado de tanto manoseo.
Si no cambia de rumbo y busca una forma de consensuar para buscar una salida a la actual situación, a Macri se le va a poner cada vez más difícil.
Hablamos de una crisis económica que no afecta sólo a los trabajadores y trabajadoras sino que está destruyendo a la pequeña industria y a los pequeños comerciantes.
Todos los días está cerrando un comercio y esto es grave y preocupante. La movilización del 7 de marzo responde al hartazgo de la gente, que pide un cambio ya.
Si el gobierno insiste en su política cerrada de aumentar las importaciones de productos industrializados y la industria local se viene en picada, no hay forma de sostener este modelo por mucho tiempo más.
La industria cigarrillera
Contrabando y pérdida de puestos de trabajo
-En este contexto tan complicado, ¿cómo está el sector tabacalero?
-Bastante mal. Hace mucho tiempo que no veía una crisis que afectara tan duramente el sector.
El problema comienza cuando el gobierno impone un fuerte aumento a los cigarrillos, que por un tiempo la industria pudo sostener. De todas formas el sector sufrió la pérdida de cerca de 600 puestos de trabajo. Fueron despidos masivos que se agravan con el avance de las nuevas tecnologías.
Peor están los trabajadores del acopio, que están haciendo zafras cada vez más breves. Con suerte trabajan dos meses en el año y son miles de familias que quedan desamparadas sin ningún tipo de ayuda.
Ni las provincias ni el gobierno nacional se preocupan por estos trabajadores y trabajadoras. Para peor, en Salta, donde están radicadas gran parte de las tabacaleras, se está tercerizando la mano de obra sin que nadie mueva un dedo para corregir eso.
-¿Y el contrabando?
-Sigue creciendo, y va a seguir haciéndolo en tanto la industria nacional esté siendo masacrada como ahora.
No hablo solo del tabaco. Esto lo están viviendo la industria textil, del calzado, el sector automotriz. Se trata de una situación muy preocupante.
-Bastante mal. Hace mucho tiempo que no veía una crisis que afectara tan duramente el sector.
El problema comienza cuando el gobierno impone un fuerte aumento a los cigarrillos, que por un tiempo la industria pudo sostener. De todas formas el sector sufrió la pérdida de cerca de 600 puestos de trabajo. Fueron despidos masivos que se agravan con el avance de las nuevas tecnologías.
Peor están los trabajadores del acopio, que están haciendo zafras cada vez más breves. Con suerte trabajan dos meses en el año y son miles de familias que quedan desamparadas sin ningún tipo de ayuda.
Ni las provincias ni el gobierno nacional se preocupan por estos trabajadores y trabajadoras. Para peor, en Salta, donde están radicadas gran parte de las tabacaleras, se está tercerizando la mano de obra sin que nadie mueva un dedo para corregir eso.
-¿Y el contrabando?
-Sigue creciendo, y va a seguir haciéndolo en tanto la industria nacional esté siendo masacrada como ahora.
No hablo solo del tabaco. Esto lo están viviendo la industria textil, del calzado, el sector automotriz. Se trata de una situación muy preocupante.
Fotos: Nelson Godoy