02
Noviembre
2016
Por un nuevo modelo productivo
El récord turístico se ha convertido en récord de precariedad laboral
CCOO Servicios
Fotos: eldiario.es
El secretario de la Federación de Política Institucional de la Federación de Servicios de CCOO en Andalucía, Gonzalo Fuentes Guerrero, considera que el récord turístico de 2016 en esa región también se ha convertido “en un récord de precariedad laboral, de cargas de trabajos, de externalizaciones y de aumento del fraude”.
Entre enero y septiembre, todas las provincias andaluzas han experimentado crecimientos tanto en el número de visitantes y pernoctaciones como en empleo y rentabilidad de la planta hotelera, y Andalucía se encuentra por encima de la media nacional en todos estos parámetros, según la valoración que Fuentes ha realizado del informe de la Actividad Turística y el Empleo de Andalucía en los nueve primeros meses del año.
Andalucía ha seguido en ese período batiendo récords, y en el acumulado (tres trimestres) lleva un crecimiento del 7,22 por ciento en visitantes, 7,75 en pernoctaciones y 7,36 por ciento en empleo.
La rentabilidad media de la planta hotelera andaluza se sitúa en 49,85 euros, un 11,86 por ciento más que hace un año.
Andalucía concentra además el 17,94 por ciento del total de visitantes en España, el 15,74 de las pernoctaciones y el 16,61 por ciento del empleo.
Mientras los principales indicadores turísticos crecen de manera “espectacular”, el empleo en el conjunto de los subsectores de la hostelería -bares, cafeterías, restaurantes, salas de fiesta, discotecas y similares-, y sobre todo su calidad, se está creando de “una forma precaria, a tiempo parcial y, en muchos casos, fraudulenta”, ya que “se trabaja más horas de las contratadas, con el consiguiente fraude a la Seguridad Social”.
En los nueve primeros meses de 2016, la afiliación a la Seguridad Social en el conjunto de los subsectores de la hostelería creció en 16.115 personas (6,96 por ciento más respecto al año anterior).
El 99,15 por ciento de esos nuevos empleos fueron temporales y a tiempo parcial y tan sólo el 0,85 por ciento indefinidos, lo que representa un total de 143 trabajadores a tiempo completo o fijos discontinuos.
A juicio del sindicato, el elevado número de contratos temporales “esconde situaciones fraudulentas”, ya que “o están cubriendo una necesidad permanente o, aun siendo temporales, al hacerse para cubrir temporadas altas en el sector, deberían realizarse bajo la modalidad de fijo discontinuo”.
Consideró también “igualmente fraudulento” el fenómeno de los “falsos autónomos”, trabajadores que son obligados a darse de alta en el régimen de autónomos para que sean ellos mismos quienes corran con el coste de la cuota de Seguridad Social.
Fuentes detalló que la precariedad laboral se complementa con la existencia de “falsos contratos formativos”, por los cuales becarios cubren puestos de trabajo habituales para ahorrarse el salario de un trabajador de cualquier categoría.
A ello se suma la subcontratación y externalización en el conjunto de departamentos de hostelería, y, en particular, el departamento de camareras de pisos, con “el objetivo de precarizar más el empleo y no aplicar los convenios sectoriales, para rebajar los salarios en cerca del 40 por ciento y empeorar las condiciones laborales”.
CCOO-A estima que el récord turístico se ha convertido “en récord de precariedad laboral”.
Esta precariedad laboral origina “una merma en la profesionalidad y la calidad de la oferta turística”.
De esta manera, para CCOO uno de los principales retos a abordar en el sector es la creación de empleo con calidad y derechos, basado en contratos fijos y fijos discontinuos, porque “un trabajador bien pagado y tratado ofrece un servicio de mucha más calidad y ello redunda en la satisfacción del turista”.
En definitiva, CCOO-A apuesta por hacer del turismo un motor de la economía andaluza pero que sirva de palanca para el cambio hacia un nuevo modelo productivo y ponga la economía al servicio de las personas, en condiciones de “igualdad, derechos, bienestar y sostenibilidad ambiental”.
Andalucía ha seguido en ese período batiendo récords, y en el acumulado (tres trimestres) lleva un crecimiento del 7,22 por ciento en visitantes, 7,75 en pernoctaciones y 7,36 por ciento en empleo.
La rentabilidad media de la planta hotelera andaluza se sitúa en 49,85 euros, un 11,86 por ciento más que hace un año.
Andalucía concentra además el 17,94 por ciento del total de visitantes en España, el 15,74 de las pernoctaciones y el 16,61 por ciento del empleo.
Mientras los principales indicadores turísticos crecen de manera “espectacular”, el empleo en el conjunto de los subsectores de la hostelería -bares, cafeterías, restaurantes, salas de fiesta, discotecas y similares-, y sobre todo su calidad, se está creando de “una forma precaria, a tiempo parcial y, en muchos casos, fraudulenta”, ya que “se trabaja más horas de las contratadas, con el consiguiente fraude a la Seguridad Social”.
En los nueve primeros meses de 2016, la afiliación a la Seguridad Social en el conjunto de los subsectores de la hostelería creció en 16.115 personas (6,96 por ciento más respecto al año anterior).
El 99,15 por ciento de esos nuevos empleos fueron temporales y a tiempo parcial y tan sólo el 0,85 por ciento indefinidos, lo que representa un total de 143 trabajadores a tiempo completo o fijos discontinuos.
A juicio del sindicato, el elevado número de contratos temporales “esconde situaciones fraudulentas”, ya que “o están cubriendo una necesidad permanente o, aun siendo temporales, al hacerse para cubrir temporadas altas en el sector, deberían realizarse bajo la modalidad de fijo discontinuo”.
Consideró también “igualmente fraudulento” el fenómeno de los “falsos autónomos”, trabajadores que son obligados a darse de alta en el régimen de autónomos para que sean ellos mismos quienes corran con el coste de la cuota de Seguridad Social.
Fuentes detalló que la precariedad laboral se complementa con la existencia de “falsos contratos formativos”, por los cuales becarios cubren puestos de trabajo habituales para ahorrarse el salario de un trabajador de cualquier categoría.
A ello se suma la subcontratación y externalización en el conjunto de departamentos de hostelería, y, en particular, el departamento de camareras de pisos, con “el objetivo de precarizar más el empleo y no aplicar los convenios sectoriales, para rebajar los salarios en cerca del 40 por ciento y empeorar las condiciones laborales”.
CCOO-A estima que el récord turístico se ha convertido “en récord de precariedad laboral”.
Esta precariedad laboral origina “una merma en la profesionalidad y la calidad de la oferta turística”.
De esta manera, para CCOO uno de los principales retos a abordar en el sector es la creación de empleo con calidad y derechos, basado en contratos fijos y fijos discontinuos, porque “un trabajador bien pagado y tratado ofrece un servicio de mucha más calidad y ello redunda en la satisfacción del turista”.
En definitiva, CCOO-A apuesta por hacer del turismo un motor de la economía andaluza pero que sirva de palanca para el cambio hacia un nuevo modelo productivo y ponga la economía al servicio de las personas, en condiciones de “igualdad, derechos, bienestar y sostenibilidad ambiental”.
