14
Septiembre
2015
Con Cleber Buzzato
Ataques paramilitares contra guaraní kaiowá involucran a senador y diputados
Ruralistas proclaman: “Hay que eliminar a estos indios inútiles”
En Montevideo, Luciana Gaffrée
Foto: Gerardo Iglesias
La comunidad indígena ñande ru marangatu, asentada por la Presidencia de la República hace más de diez años, fue atacada el 29 de agosto por un grupo de terratenientes, que asesinaron al líder indígena Semião Vilhalva Guaraní y Kaiowá, de 24 años. Cleber Buzatto, secretario ejecutivo del Consejo Indigenista Misionero (CIMI), alertó sobre la situación insostenible que viven los guarani kaiowá y denunció un ardid mediático para justificar los ataques.
-El CIMI denuncia una conspiración mediática como antesala de estos ataques que culminaron en el asesinato de Semião. ¿Cómo fue eso?
-Al principio de la semana del ataque, e incluso el mismo sábado 29, antes del asesinato de Semião Vilhalva Guaraní y Kaiowá, hubo acciones organizadas por líderes de la organización ruralista y sus familiares estancieros en Mato Grosso do Sul.
Una de las estancieras publicó un video incitando a la población local contra los indígenas, y proliferaron rumores en la región haciendo creer que los indios invadirían la ciudad y le prenderían fuego.
El día 27, Pedro Pedrossian Filho, terrateniente local publicó en su perfil de Facebook fotografías de una máquina agrícola quemada en una estancia en Paraguay como si hubiesen sido los indígenas en Mato Grosso los autores del incendio. La publicación de las falaces fotos se tornó viral entre todos sus contactos.
Esa mentira fue compartida más de 1.500 veces, con una serie de comentarios de contenido racista, amenazando con ataques y asesinatos a los indígenas guaraní kaiowá.
Se creó todo un ambiente de hostilidad para generar un marco que justificara el ataque orquestado y practicado por los propios latifundistas. Además, el ataque se dio justo después de una reunión en la asociación rural de la ciudad de Antônio João (MS), donde la señora Roseli Maria Ruiz fomentó la agresión.
-Al principio de la semana del ataque, e incluso el mismo sábado 29, antes del asesinato de Semião Vilhalva Guaraní y Kaiowá, hubo acciones organizadas por líderes de la organización ruralista y sus familiares estancieros en Mato Grosso do Sul.
Una de las estancieras publicó un video incitando a la población local contra los indígenas, y proliferaron rumores en la región haciendo creer que los indios invadirían la ciudad y le prenderían fuego.
El día 27, Pedro Pedrossian Filho, terrateniente local publicó en su perfil de Facebook fotografías de una máquina agrícola quemada en una estancia en Paraguay como si hubiesen sido los indígenas en Mato Grosso los autores del incendio. La publicación de las falaces fotos se tornó viral entre todos sus contactos.
Esa mentira fue compartida más de 1.500 veces, con una serie de comentarios de contenido racista, amenazando con ataques y asesinatos a los indígenas guaraní kaiowá.
Se creó todo un ambiente de hostilidad para generar un marco que justificara el ataque orquestado y practicado por los propios latifundistas. Además, el ataque se dio justo después de una reunión en la asociación rural de la ciudad de Antônio João (MS), donde la señora Roseli Maria Ruiz fomentó la agresión.
¡Prepárense para el conflicto, para la guerra!
Balas, bombas y palos para esos vagos
-¿Estaban involucrados dos diputados y un senador?
-Estaban. La presidente de la Asociación Rural del municipio, Roseli Maria Ruiz, los diputados federales Luiz Henrique Mandetta (DEM) y Tereza Cristina (PSB), y el senador Waldemir Moka (PMDB) asistieron a la reunión, que alentó a los productores rurales a organizar el ataque contra la comunidad indígena.
Mandetta incluso acompañó a los estancieros en el momento del ataque.
El sábado 29 por la mañana, Roseli Maria Ruiz convocó a una reunión de los terratenientes y según testigos habría arengado a los productores rurales para que la acompañasen en este ataque a los Guarani Kaiowá, que habían retomado sus tierras el 22 de agosto.
Durante el ataque, Semião recibió un disparo que lo mató. Otros indígenas, entre ellos algunos niños, resultaron heridos. Un niño de un año y pocos meses resultó herido en la espalda y en la cabeza por balas de goma.
-¿Disparos con balas de goma no son propios de la policía?
-Durante el conflicto estaban presentes también los agentes del Departamento de Operaciones de Frontera (DOF), que es un organismo oficial, un destacamento de operaciones fronterizas. Así que o los disparos partieron de la propia policía o de los estancieros.
Si quienes dispararon fueron los terratenientes, significa que están teniendo acceso a armamento de uso restringido, y si quien efectuó los disparos fue la policía significa que estaban junto con los productores rurales. Es decir, este es un tema que también tiene que ser resuelto.
En este caso puntual, el gobierno federal envió su fuerza de seguridad a la región del territorio indígena ñanderú marangatu para combatir estas acciones paramilitares, que atentan contra el estado democrático y de derecho.
-¿Qué se espera del gobierno y de las autoridades pertinentes?
-Esperamos que el Poder Ejecutivo adopte medidas concretas y eficaces, en el sentido de dar seguimiento a los procedimientos administrativos para la demarcación de las tierras de los pueblos indígenas de esta región.
También esperamos que el Poder Judicial revea algunas posiciones que ha adoptado para suspender o anular los efectos de los actos administrativos de demarcación de las tierras indígenas locales, ya que es más que evidente que sólo podemos encontrar una solución definitiva a esta situación de tensión en Mato Grosso do Sul si los no-indígenas son retirados de las tierras de los pueblos originarios.
Dos investigaciones están en curso, una por parte de la Policía Federal y otra por parte del Ministerio Público Federal (MPF) de Mato Grosso do Sul.
-Estaban. La presidente de la Asociación Rural del municipio, Roseli Maria Ruiz, los diputados federales Luiz Henrique Mandetta (DEM) y Tereza Cristina (PSB), y el senador Waldemir Moka (PMDB) asistieron a la reunión, que alentó a los productores rurales a organizar el ataque contra la comunidad indígena.
Mandetta incluso acompañó a los estancieros en el momento del ataque.
El sábado 29 por la mañana, Roseli Maria Ruiz convocó a una reunión de los terratenientes y según testigos habría arengado a los productores rurales para que la acompañasen en este ataque a los Guarani Kaiowá, que habían retomado sus tierras el 22 de agosto.
Durante el ataque, Semião recibió un disparo que lo mató. Otros indígenas, entre ellos algunos niños, resultaron heridos. Un niño de un año y pocos meses resultó herido en la espalda y en la cabeza por balas de goma.
-¿Disparos con balas de goma no son propios de la policía?
-Durante el conflicto estaban presentes también los agentes del Departamento de Operaciones de Frontera (DOF), que es un organismo oficial, un destacamento de operaciones fronterizas. Así que o los disparos partieron de la propia policía o de los estancieros.
Si quienes dispararon fueron los terratenientes, significa que están teniendo acceso a armamento de uso restringido, y si quien efectuó los disparos fue la policía significa que estaban junto con los productores rurales. Es decir, este es un tema que también tiene que ser resuelto.
En este caso puntual, el gobierno federal envió su fuerza de seguridad a la región del territorio indígena ñanderú marangatu para combatir estas acciones paramilitares, que atentan contra el estado democrático y de derecho.
-¿Qué se espera del gobierno y de las autoridades pertinentes?
-Esperamos que el Poder Ejecutivo adopte medidas concretas y eficaces, en el sentido de dar seguimiento a los procedimientos administrativos para la demarcación de las tierras de los pueblos indígenas de esta región.
También esperamos que el Poder Judicial revea algunas posiciones que ha adoptado para suspender o anular los efectos de los actos administrativos de demarcación de las tierras indígenas locales, ya que es más que evidente que sólo podemos encontrar una solución definitiva a esta situación de tensión en Mato Grosso do Sul si los no-indígenas son retirados de las tierras de los pueblos originarios.
Dos investigaciones están en curso, una por parte de la Policía Federal y otra por parte del Ministerio Público Federal (MPF) de Mato Grosso do Sul.
No basta con matar, hay que silenciar al Cimi
Y así encubrir acciones paramilitares
-La diputada estadual Mara Caseiro (PT do B) presentó una petición para abrir una Comisión Parlamentaria Investigadora (CPI). Afirma que tiene documentos que comprobarían que el Cimi fomenta invasiones de tierras en Mato Grosso do Sul.
-Esta diputada no tiene ninguna prueba concreta para justificar la solicitud de una CPI.
Ese pedido de investigación contra el Cimi es una cortina de humo para tratar de encubrir acciones paramilitares practicadas por los terratenientes de Mato Grosso do Sul, así como el asesinato del líder indígena.
Las acciones para retomar tierras realizadas por los pueblos indígenas son autónomas, ellos saben lo que tienen que hacer y son plenamente conscientes de las consecuencias potenciales derivadas de estas acciones.
Es exactamente por eso que muchas comunidades han esperado décadas para poder tomar medidas como estas. Y sólo lo han hecho cuando verdaderamente se sienten en una situación límite.
Sólo después de más de diez años acampados en un espacio extremamente reducido, deciden recuperar sus tierras. Y nuestro papel en estas situaciones es dar visibilidad a la situación y activar a los organismos competentes, buscando evitar más violencia contra estos pueblos. Fundamentalmente, denunciar la enorme violencia promovida contra ellos.
Y para eso agradecemos especialmente la ayuda de la Rel-UITA.
-Esta diputada no tiene ninguna prueba concreta para justificar la solicitud de una CPI.
Ese pedido de investigación contra el Cimi es una cortina de humo para tratar de encubrir acciones paramilitares practicadas por los terratenientes de Mato Grosso do Sul, así como el asesinato del líder indígena.
Las acciones para retomar tierras realizadas por los pueblos indígenas son autónomas, ellos saben lo que tienen que hacer y son plenamente conscientes de las consecuencias potenciales derivadas de estas acciones.
Es exactamente por eso que muchas comunidades han esperado décadas para poder tomar medidas como estas. Y sólo lo han hecho cuando verdaderamente se sienten en una situación límite.
Sólo después de más de diez años acampados en un espacio extremamente reducido, deciden recuperar sus tierras. Y nuestro papel en estas situaciones es dar visibilidad a la situación y activar a los organismos competentes, buscando evitar más violencia contra estos pueblos. Fundamentalmente, denunciar la enorme violencia promovida contra ellos.
Y para eso agradecemos especialmente la ayuda de la Rel-UITA.
Foto: CIMI
Traducción: Luciana Gaffrée