Las manifestaciones obreras fueron gigantescas en toda Francia, y esa misma noche del 31 de marzo los jóvenes que se sumaron a ellas en París sin ser ellos mismos trabajadores resolvieron que había que “llevar la resistencia social a la plaza pública”.
Coincidencias
Con el movimiento del 15-M español tienen muchos puntos de contacto (“la voluntad de cambio, el demostrar que sí se puede plantear algo distinto, la resistencia, la actitud libertaria, el hecho de no tener líderes ni portavoces, el funcionamiento en asambleas”), pero también diferencias.
Una de ellas es que aceptan que grupos políticos y centrales sindicales participen en las acampadas y en los debates, aunque los miren con cierta desconfianza.
Los responsables
Hay una minoría de privilegiados que nos hablan de Francia y de patria y ni siquiera pagan sus impuestos acá. Esa gente genera desempleo, genera pobreza, genera precariedad y nos están robando nuestras riquezas.