República Dominicana estuvo por muchos años sometida a una feroz dictadura y estas cosas no son fáciles de superar. Pero el síndrome de dictadores, arrogantes y petulantes existe en todas partes y aquí no se ha podido acabar con eso y mucha gente actúa como si estuviéramos todavía en la época de la tiranía.
Pequeños avances
Pese a la falta de respeto a la democracia en Dominicana se ha avanzado en cuanto a la democracia política, aunque no en la democracia social, ni económica, donde hay un camino muy largo por recorrer.
La corrupción un mal endémico
República Dominicana tiene un problema muy grave que, además, es una constante latinoamericana: la maldita corrupción. El mayor mal que hay en este país, algo patológico en nuestra sociedad.