El 30 de junio del 2016, un grupo de 13 trabajadores de Bimbo de Centro América S.A. decidió organizarse. Apenas habían transcurrido cuatro horas cuando la empresa los despidió a todos.
Los días 2 y 6 de julio, Bimbo canceló a otro grupo de 22 trabajadores, aduciendo una supuesta y nada creíble “reorganización de personal”.