Es una gran victoria porque les toca el bolsillo a estas compañías y de esta forma tal vez comiencen a tomar en cuenta que deben adecuar las condiciones laborales de sus plantas.
La condena a Seara Alimentos (JBS) fue la mayor aplicada por daños morales colectivos en Brasil, al llegar a aproximadamente cuatro millones de dólares.
Este fallo reconoce todas las falencias y atropellos que cometen las empresas de la industria cárnica y la desidia con la que tratan la salud y la seguridad de sus empleados y sienta un precedente que será fundamental en la defensa de los derechos de trabajadores y trabajadoras de los frigoríficos.