En Guatemala, Honduras, El Salvador, y por supuesto en México, el feminicidio es uno de los problemas sociales más graves.
En México, al menos 3.000 mujeres son asesinadas por sus parejas o ex parejas cada año, y en Guatemala 1.500, pero las cifras pueden ser mayores, porque a menudo los homicidios de mujeres están contabilizados bajo otras categorías.
La sede en Buenos Aires del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) acaba de lanzar un alerta sobre la posibilidad de migraciones masivas de mujeres hacia Estados Unidos e incluso hacia países de Sudamérica como consecuencia de los niveles de violencia de género registrados en América Central y México.
En un documento titulado “Mujeres en la huida”, ACNUR señala que en 2014 el número de mujeres originarias de países del llamado Triángulo Norte de Centroamérica y México que han buscado refugio en Estados Unidos fue 13 veces superior al de 2008.