10
Mayo
2017
Tribunal de Cuentas acusa al BNDES
JBS y los favores del Estado
La Rel
Ilustración: Charge do Humberto
El Tribunal de Cuentas de la Unión (TCU) acusó a ex directores del Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) de favorecer a la transnacional JBS en la compra del frigorífico estadounidense Swift, en 2007.
Tras haber realizado una auditoría al banco, el TCU concluyó que varios directivos de la época de la institución financiera, incluido su presidente Luciano Coutinho, aprobaron de manera irregular un aporte de 750 millones de dólares a JBS para la operación de compra.
Esa fue una de las intervenciones del BNDES durante las gestiones del PT en favor de JBS con el fin de convertirla en una mega empresa con creciente peso internacional.
El BNDESPar, rama del banco estatal especializada en el desarrollo empresarial, perdió casi 70 millones de dólares en la compra del Swift al pagar un interés de medio real por cada una de las 139 millones de acciones del frigorífico. El TCU consideró que la institución no debía abonar esas sumas y sus exdirectivos violaron normas jurídicas y éticas al hacerlo.
El Tribunal decidió abrir una investigación sobre esa operación y estudiar la posibilidad de exigir reparaciones. Los exdirectores involucrados podrían ser condenados a devolver el dinero pagado, más multas.
Con la compra del Swift, JBS se convirtió en la tercera mayor empresa de carne bovina del planeta.
Esa fue una de las intervenciones del BNDES durante las gestiones del PT en favor de JBS con el fin de convertirla en una mega empresa con creciente peso internacional.
El BNDESPar, rama del banco estatal especializada en el desarrollo empresarial, perdió casi 70 millones de dólares en la compra del Swift al pagar un interés de medio real por cada una de las 139 millones de acciones del frigorífico. El TCU consideró que la institución no debía abonar esas sumas y sus exdirectivos violaron normas jurídicas y éticas al hacerlo.
El Tribunal decidió abrir una investigación sobre esa operación y estudiar la posibilidad de exigir reparaciones. Los exdirectores involucrados podrían ser condenados a devolver el dinero pagado, más multas.
Con la compra del Swift, JBS se convirtió en la tercera mayor empresa de carne bovina del planeta.