09
Agosto
2017
Brasil | Sindicatos | CERVEZAS

“Estamos negociando para que el impacto no sea tan duro”

Amalia Antúnez
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Marcos Araujo | Foto: CNTA

La semana pasada la compañía cervecera Heineken, que hace escasos dos meses concretó la compra de Brasil Kirin, empresa que produce la marca Schin, anunció el despido masivo de 120 trabajadores de la línea de producción.
Marcos Araújo, presidente del Sindicato de Trabajadores la Alimentación de Campinas (SITAC) que tiene a Heineken en su base sindical, conversó con La Rel el pasado lunes 7 luego de haberse reunido con directivos de la compañía.

“Intentamos paliar el impacto negativo que tendrán estos despidos para el municipio de Itu, partiendo de la base que esta fábrica es una de las principales fuentes de trabajo locales. Desafortunadamente no hay vuelta atrás pero al menos estamos negociando para que el impacto no sea tan duro”, evaluó.

El próximo jueves 10 el Sindicato mantendrá una audiencia en el Ministerio Público de Trabajo para tratar el despido masivo decidido por la empresa sin negociación previa con la organización sindical.

“Inmediatamente después que me comunicaran telefónicamente la decisión de despedir a 120 trabajadores, nosotros realizamos la denuncia ante el Ministerio y de forma paralela estamos negociando con la gerencia de Heineken”, informó Araújo.

Según explicó el dirigente la compañía ofrece una extensión del seguro médico por 60 días pero en la actual coyuntura del país, con más de 14 millones de desocupados y en una ciudad donde las pocas fuentes de trabajo son la fábrica de Brasil Kirin (Heineken) y otra de PepsiCo, ese no puede ser el único beneficio para estos trabajadores.

“Cuando Heineken efectiviza la compra de Brasil Kirin inmediatamente comenzó con una reestructura de personal, echando a 18 ejecutivos y ahora a 120 operarios. Es una situación bastante común cuando se dan este tipo de fusiones pero la situación de crisis que vive el país agrava las cosas”.

Dentro de 15 días la empresa presentará una propuesta de indemnización para los trabajadores y trabajadoras afectados y el sindicato espera que además de mantener la extensión del plan de salud, contemple la entrega de la canasta básica y se brinde una compensación económica a los despedidos.

“La rápida acción del Sindicato nos permitirá mejorar en algo la situación de estos compañeros. La presión internacional de la Rel-UITA con relación a la imagen de Heineken también fue fundamental para llamar la atención de la gerencia y que esta accediera a ofrecer mejores indemnizaciones, porque esta es una empresa que cuida mucho la imagen”, puntualizó.